Por Gustavo Patiño
2020, un año que nunca nos terminó de sorprender. Nos pasmo con una pandemia, con cuarentenas. Nos enfrentó a nosotros mismos y a la convivencia con las personas que vivimos, sean nuestras familias, nuestras parejas o amigos. Y en el peor de los escenarios, nos enfrentó a la soledad.
Nos vimos sumergidos en un mundo
nunca antes visto de restricciones y prohibiciones, donde nuestras actividades
diarias (diurnas y nocturnas) se vieron alteradas. Nuestras rutinas desde los
momentos más básicos como despertarnos, ya no volvieron a ser iguales; incluso
me atrevería a decir que no volverán a ser iguales.
Debimos aprender desde lavarnos las
manos, hasta cómo manejar una aplicación/ pagina web para reuniones virtuales
de trabajo o estudio. Nos tuvimos que alejar de nuestros seres queridos,
postergar vacaciones, conciertos, fiestas y celebraciones. Aprendimos palabras
y frases nuevas: “la nueva normalidad”, “reinvención”, “aislamiento selectivo
con distanciamiento individual responsable” entre otras.
Y aunque el panorama no pinta “bien”, en realidad en esta ocasión les quiero hablar de algo bastante interesante, algo positivo, tal vez, en medio de este “nuevo caos”. Empiezo por mencionar los pagos y compras online que tan de moda se pusieron… ¡ALELUYA! Se acabaron las filas para los pagos de servicios, se acabaron las filas para las compras, tal parece que la mayoría de cosas tienen solución. La era de las compras virtuales empezó con compras compulsivas, para evitar, quizá, la ansiedad y el encierro.
Esta dinámica de compra ayudo al
surgimiento de muchos EMPRENDEDORES, quienes cambiaron su modalidad de venta a
través del uso de páginas web y redes sociales y así lograron conservar su
negocios. Las tiendas están abiertas las 24 horas del día, los siete días de la
semana y, además, llegan por domicilio a tu casa, lo que evita la molestia de
la movilidad y, en algunos casos, pasar penas por entrar a algún tipo de
tienda.
Sí, aunque no lo creas a algunas
personas les produce pena y temen al qué dirán si son vistos entrando a un sex
shop. A otros simplemente les da pena ir a comprar algún “juguete” por el mismo
tema del prejuicio social. Y aquí es donde la pandemia les ayudó.
Las tiendas sex
shop están en auge, juguetes únicos para adultos que hicieron para muchos la
cuarentena una buena amiga, bien sea si estabas solo o en pareja.
La compras online sin duda alguna
favorecieron totalmente la discreción y el “anonimato”, dos cosas que no se
consiguen fácilmente en una tienda física. Si bien tenemos cambios culturales
en torno a las prácticas sexuales y el tema de las orientaciones sexuales
diversas, cada día están más normalizadas. Muchos y muchas prefieren seguir
teniendo para la intimidad de su dormitorio ciertos juegos.
Los sex shop online garantizan
esta reserva tanto en la entrega (el mensajero sabe qué está entregando), como
incluso en el pago.
Entre la gran variedad de tiendas y
opciones en el mercado online, me puse en contacto con @sex_candy_shop una
tienda por Instagram que surgió durante la pandemia como parte de varios
emprendimientos de un joven bogotano que empezó a trabajar en esta amplia
industria, con un catálogo de posibilidades variado para todos los gustos sin
importar su orientación sexual y esto fue lo que encontramos:
Entre los artículos más vendidos se
encuentran los dildos o consoladores, los vibradores, lubricantes, bolas chinas
y aceites, los cuales son comprados tanto por hombres como por mujeres
por igual. Las duchas anales y vaginales tienen un mercado particular, pues son
objeto de compra de los hombres, lo que me lleva a las preguntas: ¿temen aún
las mujeres comprar una ducha anal o vaginal? ¿Saben de qué manera y para que
se usa?
Los disfraces,
lubricantes, aceites, velas y juegos son los objetos más consultados y más
comprados por las mujeres así como los nuevos objetos/dildos vibradores, los
cuales se pueden manejar de manera remota atreves de un control o del
celular.
Por último y no menos importantes un
pequeño número de hombres suelen comprar ocasionalmente estimulantes y
potencializadores sexuales.
Lo anterior sin duda nos demuestra
que los juegos sexuales son el mejor recurso para revivir la llama del amor y
la pasión, y claro, para salir de la aburrida monotonía. Es bueno también
aclarar que estos juegos u objetos que compramos en un sex shop no solo los
podemos usar con una pareja, muchos de ellos también (la gran mayoría) los
podemos usar nosotros mismos estimulando nuestros órganos sexuales para así
conocernos, exploraremos y obtener nuestro propio placer sexual.
No está de más recordarte que la
masturbación ayuda a tu salud física y mental. Cuando tienes un orgasmo, el
cuerpo libera endorfinas que automáticamente bloquean el dolor y te hacen
sentir bien (feliz). Estas sensaciones de placer que se tiene en un orgasmos
las puedes conseguir masturbándote o teniendo sexo con alguien.
Y ahora sí, después de hablar de algunas ventajas de las compras online de artículos sexuales, no esperes más, dale paso a la creatividad, a las sensaciones y a encontrar placer de diversas formas en esta cuarentena.
https://orgullolgbtcolombia.blogspot.com/2021/02/compras-online-y-juguetes-sexuales-de.html
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